Jesucristo No es Dios

Jesucristo NO es DIOS

Nunca lo fue, y Nunca lo sera

Victor Paul Wierwille

ERRORES COMUNES DE COMPRENSIÓN

Aquellos que no se adhieren a los principios fundamentales de la interpretación bíblica han usado de manera errónea muchas escrituras para probar la doctrina de "Dios el Hijo". Este capítulo enumera los malentendidos más resaltantes seguidos de sus aclaratorias.

Éxodo 3:14

Y respondió Dios a Moisés: YO SOY EL QUE SOY. Y dijo: Así dirás a los hijos de Israel: YO SOY me envió a vosotros.

La expresión en hebreo literalmente dice "Seré el que seré". No existía un nombre pronunciable para el Dios verdadero, en contraste con los dioses paganos a los que siempre se les llamaban por nombres.

Salmos 2:7

Yo publicaré el decreto;

Jehová me ha dicho: Mi hijo eres tú;

Yo te engendré hoy.

Salmos 2 es profético, anticipando la primera y segunda venida de Cristo.

Salmos 110: 1 y 4

1 Jehová dijo a mi Señor:

Siéntate a mi diestra,

Hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies.

4 Juró Jehová, y no se arrepentirá:

Tú eres sacerdote para siempre

Según el orden de Melquisedec.

Este Salmo en su totalidad es profético, anticipando la obra redentora de Cristo.

Salmos 130: 7 y 8

7 Espere Israel a Jehová,

Porque en Jehová hay misericordia,

Y abundante redención con él;

8 Y él redimirá a Israel

De todos sus pecados.

La palabra "espere" en el versículo 7 es la clave. Esperar (de esperanza) se usa para referirse a algo que es futuro. Israel esperó la venida del Mesías redentor. Ellos esperaron con ansias esta primera venida, así como nosotros esperamos ansiosamente la segunda.

Isaías 40: 3

Voz que clama en el desierto: Preparad camino a Jehová; enderezad calzada en la soledad a nuestro Dios.

Esta afirmación profética significa que Juan vino a enderezar el camino de Dios. Jesucristo era el plan de Dios para la redención del hombre. Juan era un siervo de Dios, no de Cristo. Esta misma situación se presenta en Mateo 3:3 y Juan 1:23.

Mateo 3:3

Pues éste es aquel de quien habló el profeta Isaías, cuando dijo:

Voz del que clama en el desierto:

Preparad el camino del Señor (Jehovah),

Enderezad sus sendas.

Juan 1:23

Dijo: Yo soy la voz de uno que clama en el desierto:

Enderezad el camino del Señor (Jehovah), como dijo el profeta Isaías.

El libro de Daniel dice que Sadrac, Mesac y Abed-nego fueron puestos en el horno ardiente por órdenes de Nabucodonosor.

Daniel 3:25

Y él dijo: He aquí yo veo cuatro varones sueltos, que se pasean en medio del fuego sin sufrir ningún daño; y el aspecto del cuarto es semejante a hijo de los dioses.

Esto no dice que la cuarta forma era hijo de los dioses, sino que era como hijo de los dioses[1]. El significado de la palabra "semejante" no es literal, ya que su uso convierte a esta expresión en un símil, una figura literaria.

Mateo 1:21 y 23

21 Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados.

23 He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo,

Y llamarás su nombre Emanuel,

que traducido es: Dios con nosotros.

Los nombres dados a Cristo, como Jesús, que significa "Dios es nuestro Salvador" y Emanuel, que significa "Dios con nosotros", enfatizan su servicio a la humanidad. Estos nombres no indican que Jesús es Dios, así como tampoco el nombre Josué, que quiere decir "Dios nuestro Salvador", no significa que Josué era Dios, o que una niña llamada Bárbara quiere decir que sea una bárbara de verdad.

Mateo 12:31 y 32

31 Por tanto os digo: Todo pecado y blasfemia será perdonado a los hombres; mas la blasfemia contra el Espíritu no les será perdonada.

32 A cualquiera que dijere alguna palabra contra el Hijo del Hombre, le será perdonado; pero al que hable contra el Espíritu Santo, no le será perdonado, ni en este siglo ni en el venidero.

El Espíritu Santo es Dios.[2] El versículo 32 claramente indica la diferencia entre Dios y su Hijo.

Mateo 22:44

Dijo el Señor (Jehovah) a mi Señor:

Siéntate a mi derecha,

Hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies?

En Efesios 4:5 y 6, dice que hay un Señor (v.5), y un Dios (v.6). Jesucristo es nuestro Señor y Dios es el Padre de todos.

Lucas 2:11

Que os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es CRISTO el Señor.

Cristo es nuestro señor. Dios es nuestro Señor por sobre todo. Comparemos 1 Corintios 15: 27 y 28; Juan 14:28; 1 Corintios 8:6 y 1 Corintios 11:3

Lucas 3:21 y 22

21 Aconteció que cuando todo el pueblo se bautizaba, también Jesús fue bautizado; y orando, el cielo se abrió,

22 y descendió el Espíritu Santo sobre él en forma corporal, como paloma, y vino una voz del cielo que decía: Tú eres mi Hijo amado; en ti tengo complacencia.

En estos versículos es clara la distinción entre Dios, Su Hijo y la habilidad espiritual (espíritu santo) que Cristo recibió de Dios.

Lucas 18: 18 y 19

18 hombre principal le preguntó, diciendo: Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna?

El versículo 19 claramente muestra a Jesús corrigiendo al hombre principal por llamarlo "Maestro bueno". En esa cultura Oriental "Maestro bueno" se refiere a Dios.

19 Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno?. Ninguno hay bueno, sino solo Dios.

Juan 3:13-15

13 Nadie subió al cielo, sino el que descendió del cielo; el Hijo del Hombre, que está en el cielo.

14 Y como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así es necesario que el Hijo del Hombre sea levantado,

15 para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.

Los manuscritos existentes más antiguos eliminan las últimas seis palabras del versículo 13, "que está en el cielo". El hijo del hombre bajó por medio de la concepción milagrosa de Dios.[3] Los versículos 14 y 15 aclaran el tiempo de su ascensión en el futuro. Cristo hablaba con Nicodemo con respecto a lo que se haría disponible en el futuro.

Juan 5: 17-19

17 Y Jesús les respondió: Mi Padre hasta ahora trabaja, y yo trabajo.

18 Por esto los judíos aún más procuraban matarle, porque no sólo quebrantaba el día de reposo, sino que también decía que Dios era su propio Padre, haciéndose igual a Dios.

19 Respondió entonces Jesús, y les dijo: De cierto, de cierto os digo: No puede el Hijo hacer nada por sí mismo, sino lo que ve hacer al Padre; porque todo lo que el Padre hace, también lo hace el Hijo igualmente.

El Hijo sólo podía caminar con el poder y autoridad de su Padre, que le pertenecían a él si obedecía y llevaba a cabo lo que su Padre le dijera. El contexto hace que la diferencia entre el Padre y el Hijo sea clara.

Juan 5:23

Para que todos honren al Hijo como honran al Padre. El que no honra al Hijo, no honra al Padre que le envió.

Si alguien no respetara a su Hijo, ustedes también se podrán sentirse insultados y perturbados.

Juan 6:20

Mas él les dijo: Yo soy; no temáis.

En griego es igual, "yo soy". Esto no muestra que Jesucristo es Dios, así tampoco como que yo diga "yo soy" comprueba que yo soy Dios.

Juan 8:58

Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Antes que Abraham fuese, yo soy.

Cristo estaba con Dios en su presciencia antes de que naciera Abraham. Comparen notas de Éxodo 3:14, Juan 9:9 y Juan 18:6 contienen el mismo error de interpretación:

Juan 9:9

Unos decían: Él es; y otros: A él se parece. Él decía: Yo soy.

Juan 18:6

Cuando les dijo: Yo soy, retrocedieron, y cayeron a tierra.

La expresión "yo soy" no sólo se usa para referirse a Dios.

Juan 12: 38-41

38 Para que se cumpliese la palabra del profeta Isaías, que dijo:

39 Señor (Jehovah), ¿quién ha creído a nuestro anuncio?

¿Y a quién se ha revelado el brazo del Señor (Jehovah)?

40 Por esto no podían creer, porque también dijo Isaías:

Cegó los ojos de ellos, y endureció su corazón; Para que no vean con los

Ojos, y entiendan con el corazón,

Y se conviertan y yo los sane.

41 Isaías dijo esto cuando vio su gloria, y habló acerca de él.

Isaías vio a Cristo en su revelación profética. Él esperaba ansiosamente la venida de Cristo.

Juan 14: 1, 8, 9, 16

1 No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí.

8 Felipe le dijo: Señor, muéstranos el Padre, y nos basta.

9Jesús le dijo: ¿Tanto tiempo hace que estoy con vosotros,

y no me has conocido, Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre; ¿cómo, pues, dices tú: Muéstranos el Padre?

16 Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre:

Estos versículos claramente muestran al Padre, a su Hijo y al don del espíritu santo no como identidades sino como tres trabajando al unísono, con unidad de propósito.

Al examinar Juan 16: 13 y 15, noten cuidadosamente el pronombre "él"

Juan 16: 13 y 15

13 Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir.

15 Todo lo que tiene el Padre es mío; por eso dije que tomará de lo mío, y os lo hará saber.

El pronombre "él" que se refiere al espíritu es masculino, para concordar con la palabra "consolador" en el versículo 7.

Esta palabra "consolador" es una palabra descriptiva usada en lugar de la palabra "espíritu" y gramaticalmente hablando, los pronombres deben concordar en género con el sustantivo con el cual se relacionan. En griego, el género de una palabra no necesariamente denota el verdadero género del objeto, por lo que al usar el pronombre "él" no se está queriendo decir que sea una persona de género masculino, y por lo tanto no esta relacionado a una persona o que forme parte de la trinidad. ¿Y que acerca de Romanos 8:26, donde encontramos el pronombre "el espíritu mismo" donde "el" se refiere en una forma neutra en griego? . Por lo tanto, Juan 16:13 y 15, no prueba que el espíritu es parte de la trinidad.

Juan 16: 27-30

27 Pues el Padre mismo os ama, porque vosotros me habéis amado, y habéis creído que yo salí de Dios.

28 Salí del Padre, y he venido al mundo; otra vez dejo el mundo, y voy al Padre.

29 Le dijeron sus discípulos: He aquí ahora hablas claramente, y ninguna alegoría dices.

30 Ahora entendemos que sabes todas las cosas, y no necesitas que nadie te pregunte; por esto creemos que has salido de Dios.

Hubo otros enviados de Dios, pero ninguno fue concebido por Dios como lo fue Jesús a través de María. Ver Capítulo 3, págs. 73-76.

Hechos 2:34

Porque David no subió a los cielos; pero él mismo dice:

Dijo el Señor (Jehovah) a mi Señor:

Siéntate a mi diestra,

Efesios 4: 5 y 6 establece que hay un Señor y un Dios, que Jesucristo es nuestro Señor pero Dios es su Señor o Amo. Comparen esto con la nota de Salmos 110:1 en la página 136. Vean también 1 Corintios 11:3

Hechos 7:37-39

37 Este Moisés es el que dijo a los hijos de Israel: Profeta os levantará el Señor (Jehovah) vuestro Dios de entre vuestros hermanos, como a mí; a él oiréis.

38 Este es aquel Moisés que estuvo en la congregación en el desierto con el ángel que le hablaba en el monte Sinaí, y con nuestros padres, y que recibió palabras de vida que darnos;

39 Al cual nuestros padres no quisieron obedecer, sino que le desecharon, y en sus corazones se volvieron a Egipto,

El pronombre "aquel "en el versículo 38 se refiere a Moisés, no a Cristo.

Hechos 7:59

Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu.

En versiones inglesas aparece: "y apedreaban a Esteban, mientras el invocaba a Dios". Los textos críticos griegos no contienen la palabra Dios. Los textos griegos dicen "Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu." Los textos en arameo también omiten la palabra "Dios". En esta versión de Reina Valera esta sin alteración omitiéndose la palabra "Dios".

Gálatas 4:6

Y por cuanto sois hijos, Dios envió a vuestros corazones el Espíritu de su Hijo, el cual clama: ¡Abba, Padre!

En uno de los primeros manuscritos existentes del Nuevo Testamento del Chester Bealty Papyrii, conocido como P46 (c. 200 a. D), se omite la palabra "Hijo". Los manuscritos dicen "...Dios envió a nuestros corazones su Espíritu".

Colosenses 1:13-18

13 El cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo,

14 En quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados.

15 Él es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación.

16 Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él.

17 Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten;

18 Y él es la cabeza del cuerpo que es la iglesia, él que es el principio, el primogénito de entre los muertos, para que en todo tenga la preeminencia;

El versículo 15 dice que "su amado hijo" es el primogénito de toda creación. Luego, los versículos 16 y 17 son un paréntesis (parembole, una figura literaria) en la cual la inserción se completa a sí misma explicando a Dios el Creador. El versículo 18 retoma la idea del versículo 15 para hablar de Cristo como la cabeza del Cuerpo. Ver Capítulo 3.

Colosenses 2:9

Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad,

Dios estaba en Cristo. Colosenses 1:27 dice que Cristo está en nosotros. Esto no nos convierte en Cristo o en Dios.

1 Tesalonicenses 3:11

Mas el mismo Dios y Padre nuestro, y nuestro Señor Jesucristo, dirija nuestro camino a vosotros.

El primer conector "y" es kai en griego, y se traduce con frecuencia como "también". Entonces diría "el mismo Dios también Padre nuestro"

1 Timoteo 2:3

Porque esto es bueno y agradable delante de Dios nuestro Salvador,

Tito 1:3

y a su debido tiempo manifestó su palabra por medio de la predicación

que me fue encomendada por mandato de Dios nuestro Salvador,

Dios es nuestro Salvador ya que es el autor del plan de salvación. Jesucristo hizo disponible el nuevo nacimiento como el agente del plan de salvación, el cumplidor de la fe. Esta situación surge en otra parte de Tito 3:4 y Judas 25.

Tito 3:4

Pero cuando se manifestó la bondad de Dios nuestro Salvador, y su amor para con los hombres,

Judas 25

Al único y sabio Dios, nuestro Salvador, sea gloria y majestad, imperio y potencia, ahora y por todos los siglos. Amén.

Dios es el autor de la salvación

Tito 2:13

Aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo,

Jesucristo es parte de la gloria de su Padre. En todos los textos griegos críticos y manuscritos existentes este versículo se lee "aguardando la esperanza bienaventurada, y la manifestación de la iglesia del Gran Dios también nuestro Salvador Jesucristo". La gloria del Gran Dios es su Hijo.

Hebreos 1:2

En estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo;

La palabra "universo" es la palabra aion que significa "eras". Fue a causa de las obras redentoras de Cristo que Dios estructuró las diferentes eras para completar su plan redentor. Ver Capítulo 3.

Hebreos 1:10

Y:

Tú, oh Señor (Jehovah), en el principio fundaste la tierra,

Y los cielos son obra de tus manos.

"Y: Tú, oh Señor" se dirige a Dios quien es el creador de los cielos y la tierra de acuerdo a Génesis 1:1.

1 Juan 5:20

Pero sabemos que el Hijo de Dios ha venido, y nos ha dado entendimiento para conocer al que es verdadero; y estamos en el verdadero, en su Hijo Jesucristo. Este es el verdadero Dios, y la vida eterna.

Las palabras "al que es verdadero" son dos palabras griegas que se traducen literalmente "el verdadero". "Verdadero" es un adjetivo usado aquí como sustantivo y como tal se traduce "el verdadero". En otras palabras el versículo dice "Y sabemos que el Hijo de Dios ha venido, y nos ha dado entendimiento para conocer al verdadero [Dios; Juan 1:18], y estamos en el verdadero [Dios] por la obra de su Hijo Jesucristo. Éste [el verdadero] es el verdadero Dios quien es vida eterna."

[1] NT: en el versículo en inglés dice "the Son of God", esto es "el Hijo de Dios". "y el aspecto del cuarto es semejante al Hijo de Dios", "ángel de Dios".

[2] Ver Apéndice A

[3] Ver Capítulo 3, págs. 73-76

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